Vivir la marca: Generar experiencias efectivas en los consumidores
Es bien sabido que hoy en día los consumidores ya no buscan simplemente ver un comercial, o escuchar un spot radial. Si nos vamos más allá, la publicidad gráfica en redes sociales, periódicos y revistas ya no genera la misma sensación que en sus comienzos. ¿La razón? Muy sencilla. Vivimos en un mundo en el que los consumidores, muy aparte de ver, necesitan vivir lo que se está mostrando. Las personas cada vez se vuelven más curiosas, las tendencias van cambiando. Es muy importante para ellos sentir que tienen una relación mucho más estrecha con las marcas.
Las experiencias se quedan en nuestra memoria, en nuestra vida como una marca imborrable, nuestra vida en sí se construye con las experiencias que tenemos. Por eso siempre es importante que en el momento de generar una experiencia, esta tenga tal impacto, que se convierta en parte de la vida de los consumidores, que en el futuro ellos puedan decir que su marca favorita es increíble.
Sea en una gran magnitud o en pequeña magnitud, las experiencias que una marca genere deben estar siempre a la altura o tal vez más arriba de las expectativas del consumidor. Sabemos que todas las marcas constituyen en un porcentaje muy alto nuestras vidas, en el momento en que consumimos o compramos determinada marca, estamos en la cima del mundo, nosotros tomamos el protagonismo en el momento de conocer lo que esta marca ofrece.
De aquí viene la realidad. Existen experiencias trascendentales, buenas, malas y muy malas. De cualquier manera, sea buena o mala, el cliente siempre va a recordar el resultado de aquel momento en que conoció que tenía la marca para ofrecer.
Todo esto combinado con la publicidad mencionada al principio de este artículo, dará lugar a un storytelling único de la marca. Si una experiencia es muy buena, la marca inmediatamente tomará el lugar de una "marca amiga" y todo esto se consigue de la manera más sencilla: Rompiendo el status quo.
Esto convierte al concepto creativo de la marca en algo totalmente potente, para que luego el consumidor por sí mismo comente acerca de como la marca se comunicó con el, hablará de sus vínculos con la marca e incluso se generará lo que llamamos publicidad boca a boca.Todo esto generará una imagen para la marca, sin embargo hay que tomar en cuenta de que todo depende mucho del nivel de efectividad de la experiencia. Si esta fue buena, el cliente mismo se encargará de demostrarlo, y si esta fue mala, evidentemente los resultados no serán alentadores para la imagen de marca.
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